CORRUPCIÓN

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martes, 12 de agosto de 2014

#CORRUPCIÓN: La corrupción es mala, pero puede ser peor

La corrupción es mala, pero puede ser peor

DEL EDITOR AL LECTOR

  • Ricardo Roa
Es una historia vieja y a la vez nueva, que parece más de lo mismo pero que no es más de lo mismo. Lo viejo es la corrupción. Lo nuevo es la corrupción asociada al tráfico de drogas. Y en esta historia hay de los dos.
Tiene diez años y una protagonista principal: la efedrina, un químico dual que sirve tanto para hacer remedios como para fabricar drogas ilegales. Util para curar o matar. Alrededor de la efedrina hay una trama de funcionarios negligentes y funcionarios corruptos, gendarmes sólo corruptos, narcoempresarios farmaceúticos y secretarias y algo más puestas por los narcoempresarios farmaceúticos. También, una interna feroz entre un hombre del riñón de Kirchner y un ministro clave de Kirchner.
El escenario fue la Sedronar, el organismo antidroga que tuvo mucho de droga y poco o nada de anti. En 2003 autorizaba importar hasta 1,5 tonelada de efedrina por año, suficiente para abastecer todo el mercado interno de medicamentos. En 2007 dejó entrar 20 toneladas y así como entraban salían rumbo a México, que en su lucha contra los carteles narcos había prohibido la importación.
Esa ruta se cortó de golpe a mediados de 2008 por el triple crimen de General Rodríguez. Sebastián Forza, Leopoldo Bina y Damián Ferrón aparecieron muertos en un zanjón de la ruta 24. Eran proveedores de efedrina a narcotraficantes y se habían quedado con el negocio de otro, que los mandó a matar y sigue prófugo.
La historia del triple asesinato tiene otra historia adentro: la historia de lo que en esos años pasó en la Sedronar y que ha comenzado cada vez más a salir a la luz, como lo revela la investigación de Nicolás Pizzi en Clarín (ver pág. 15).
En síntesis, un grupo de funcionarios durante la gestión de José Granero se asoció con droguerías a las que autorizaba importar cantidades industriales de efedrina.
Compra legal para uso ilegal: supuestamente eran para medicamentos, cuando eran principalmente para carteles mexicanos. La Gendarmería nunca vio o quiso ver nada a pesar de que debía hacer inteligencia en la Sedronar. Rafael Bielsa, que reemplazó a Granero, llamó a la Prefectura para hacer los sumarios internos.
Granero era un hombre del riñón de Kirchner y también lo era su secretario, Miguel Zacarías. Los dos llegaron del PAMI. Muchos dicen que en los hechos Zacarías era el jefe y Granero su secretario y que es Zacarías quien está comprometido de lleno en la corrupción. Los dos eran y son enemigos irreconciliables de Aníbal Fernández, entonces jefe de Gabinete.
Un kilo de efedrina puesta en Europa podía valer mil veces lo que se pagaba acá. Un negociado increíble en el que están involucrados al menos los dueños de dos droguerías. Lo insólito es que en vez de despejar dudas sobre su papel en el escándalo, el Gobierno acuse a los medios de montar un relato periodístico. Pero ésta es la historia de siempre.

corrupcion: CORTE DE SANTIAGO DICTA SENTENCIA EN LA ARISTA PRINCIPAL DEL DENOMINADO CASO MOP-GATE

CORTE DE SANTIAGO DICTA SENTENCIA EN LA ARISTA PRINCIPAL DEL DENOMINADO CASO MOP-GATE
La Corte de Apelaciones de Santiago dictó sentencia de segunda instancia en la investigación por la serie de irregularidades cometidas en el Ministerio de Obras Públicas, y que los medios de comunicación denominaron: caso "MOP-Gate", causa que instruyó la ministra en visita Gloria Ana Chevesich Ruiz.
En el fallo (causa rol 2284-2010), la Quinta Sala del tribunal de alzada -integrada por los ministros Jorge Dahm, Juan Antonio Poblete y el abogado David Peralta- confirma la sentencia condenatoria en contra de un grupo de empleados públicos, pero revoca la absolución dictada en favor de varios ejecutivos ligados a empresas consultoras.
 
La confirmación de las condenas dictada por la ministra en visita el 30 de junio de 2010, son las siguientes:
-Sergio Cortés Castro: 5 años de presidio por su responsabilidad como autor del delito de fraude al fisco;
-Carlos Cruz Lorenzen: 3 años de presidio por su responsabilidad como autor del delito de fraude al fisco;
-Óscar Araos Guzmán: 541 días de presidio por su responsabilidad como autor del delito de fraude al fisco;
-Nassir Sapag Chain: 200 días de presidio por su responsabilidad como autor de fraude al fisco.
-Eduardo Bartholin Zanetta: 61 días de presidio por su responsabilidad como autor del delito de fraude al fisco;
-Gonzalo Castillo Navasal: 61 días de presidio por su responsabilidad como autor del delito de fraude al fisco;
-Héctor Peña Véliz: 61 días de presidio por su responsabilidad como cómplice del delito de fraude al fisco;
-Roberto Salinas Briones: 60 días de prisión por su responsabilidad como autor del delito de fraude al fisco;
-Sergio Hinojosa Ramírez: 60 días de prisión por su responsabilidad como autor del delito fraude al fisco;
-Ramón Silva Améstica: 60 días de prisión por su responsabilidad como autor del delito de fraude al fisco;
-Héctor Quiroz Astorga: 60 días de prisión por su responsabilidad como autor del delito de fraude al fisco;
-Dolores Rufián Lizana: 60 días de prisión por su responsabilidad como autora del delito de fraude al fisco, y
-Luis Jara Núñez: 40 días de prisión por su responsabilidad como encubridor del delito de fraude al fisco.
Revocaciones
A ellos se sumaron los imputados que habían sido absueltos en primera instancia, los que, ahora, la Corte de Santiago sanciona con penas de 60 días de prisión por su responsabilidad como autores del delito de fraude al fisco. Ellos son:Marcos Luraschi PandolfAbdón Naim PajundakisSergio González TagleFrancisco González del Río,Eduardo Valenzuela FrerautLuis Arrau del CantoFrancisco Donoso DíazAlejandro Gutiérrez Arteaga,Carlos Calderón Pinto Luis Solar Pinedo; en tanto, Jorge Quiroz Castro fue condenado a 41 días de prisión.
Por reunir los requisitos legales, a todos los condenados se les concedió el beneficio de la remisión condicional de la pena, salvo Cortés Castro, a quien se le concedió el beneficio de la libertad vigilada. Además, a todos se les impuso la pena accesoria de inhabilitación especial perpetua para cargos u oficios públicos y deberán pagar una multa correspondiente al 25% del monto fraudado.
Para establecer la responsabilidad de los 11 nuevos condenados, todos pertenecientes a empresas consultoras que firmaron contratos con el MOP, el tribunal de alzada capitalino consideró que: "Dentro del marco de aquellas licitaciones que el Ministerio de Obras Públicas realizó sin llamar a propuesta pública, sino que por estar bajo el monto para tener que utilizar ese procedimiento, recurrió a la licitación privada o por invitación o trato directo, donde antes de invitar a las distintas empresas consultoras para que presentaran sus ofertas para un determinado trabajo, funcionarios de esa cartera estatal tomaban contacto con una de ellas a la que se le proponía participar en la consultoría, pero se le solicitaba que aumentara su costo en una determinada cantidad, la que justificaría con una boleta de la empresa GATE S.A. por una asesoría inexistente, y de esta manera aseguraba que se le adjudicara el trabajo al que se llamaba por esta modalidad (…) Que, de esta manera, el consultor o empresa llamado antes de la licitación, aceptaba esa modalidad de operar. No está en cuestión así la existencia o calidad de la consultoría, como tampoco lo que efectivamente se contrataba o se cubría con el monto que se solicitaba, lo que se reprocha es que dentro del costo se incluía además, una partida importante de dinero, que se justificaba con una boleta de GATE S.A. por trabajos inexistentes. En definitiva, el trabajo le costaba al Fisco una cantidad mucho mayor que la real", sostiene la sentencia.
Resolución que agrega: "Así las cosas, los consultores o empresas consultoras, sabían de antemano, esto es, antes siquiera de postular a adjudicarse algún trabajo, que estaban cobrando un monto superior al real y que éste no era para su beneficio o utilidad, sino que ello simulaba un gasto inexistente, que se justificaba para pagar otras obras, servicios o mejorar los sueldos de los que laboraban en el Ministerio de Obras Públicas (…) el artificio expuesto, deja en evidencia que los funcionarios del Ministerio de Obras Públicas se coludían con los consultores, los que obraban a sabiendas que se estaban alterando los precios, y que se prestaban a ello para adjudicarse la propuesta a que llamaba ese Ministerio. Es claro y notorio, que tales consultores no podían estar ajenos a lo anormal del procedimiento, ya que lo conocían y concertaban antes que se iniciara el proceso de invitación y presentación de propuestas, con la seguridad de que de esa forma aseguraban la adjudicación del trabajo".
Además, la Quinta Sala explica que no "(…) es posible aceptar la excusa de los consultores en orden a que como el procedimiento les era propuesto por un funcionario del Ministerio de Obras Públicas y éste les aseguraba que así se obraba en esa repartición pública, entendieran que ello era aceptable y enteramente lícito. Ello por cuanto todos los imputados son profesionales de carreras que importan altos estudios superiores, la mayoría con postgrado, de modo que le resulta perfectamente exigible entender que esta no es una manera normal de operar y menos aun tratándose de fondos públicos. Cualquier persona con una mediana inteligencia entiende que abultar el precio de un trabajo, justificándolo con una boleta de un tercero y entregando ese importe al girador de esa boleta por un trabajo inexistente y todo ello para asegurar que se adjudique en su favor una consultoría, representa un fraude para quien paga y encarga el trabajo. Por lo que no parece creíble que por el sólo hecho que se lo pedía un funcionario del Ministerio, ello no fuera representado siquiera por alguno de los consultores, lo que demuestra que sabían de la anormalidad y que ella operaba en su beneficio, ya que les aseguraba el contrato de consultoría".
Asimismo, el tribunal de alzada ratificó la decisión absolutoria en favor de: Leonel Vivallos Medina,Víctor Rey Pozo, Francisco Aguirre Arias, Jorge Echenique Larraín, Eduardo Paredes Molina y Yerko General Carrasco.
En el aspecto civil, se acogió la demanda deducida por el Consejo de Defensa del Estado, y se condenó a pagar:
-Carlos Enrique Cruz Lorenzen: $799.142.217;
-Sergio Cortés Castro: $777.842.217;
-Roberto Salinas Briones: $133.700.000;
-Héctor Peña Véliz: $777.842.217;
-Héctor Quiroz Astorga: $350.177.717;
-Ramón Silva Améstica: $57.925.617;
-Luis Antonio Jara Núñez: $150.390.000;
-Eduardo Bartholin ZanettaGonzalo Castillo Navasal Nassir Sapag Chain: $21.300.000 cada uno;
-Óscar Araos Guzmán: $543.562.836;
-María Dolores Rufián Lizana: $307.573.953;
-Marcos Luraschi Pandolfi: $22.550.000;
-Abdón Naim Pajundakis: $42.603.764;
-Francisco González del Río: $12.400.000;
-Jorge Quiroz Castro: $13.000.000;
-Eduardo Valenzuela Freraut: $ 11.520.000;
-Luis Arrau del Canto: $10.000.000;
-Francisco Donoso Díaz: $ 21.300.000;
-Sergio González Tagle: $15.000.000;
-Alejandro Gutiérrez Arteaga: $16.500.000, y
-Carlos Calderón Pinto solidariamente con Luis Solar Pinedo: $ 59.300.000.

Quinta Sala del tribunal de alzada confirma la sentencia condenatoria en contra de un grupo de empleados públicos, pero revoca la absolución dictada en favor de varios empresarios ligados a compañías consultoras.